sábado, 23 de marzo de 2013

KFC - Kentucky Fried Chicken: La receta para preparar este delicioso pollo rebozado crujiente



Ni McDonald's, ni Burguer King, ni Telepizza, donde esté un buen pollo frito, que se quite todo el fast-food.

Después de varias recetas de tapas y pinchos, creo que tocaba un pequeño cambio, y no se me ocurre nada mejor que compartir con vosotros una receta sencilla, que evoca los sabores y texturas del famoso pollo frito americano, el KFC - Kentucky Fried Chicken (espero que no me demanden). Además os daré alguna pista para que podáis personalizar la receta a vuestro gusto, y daréis un nuevo rumbo a la elaboración del pollo frito enharinado que normalmente hacemos.

Lo cierto es que esta es una receta que llevaba mucho tiempo sin hacer, y el otro día me puse manos a la obra, aprovechando los "5 minutos" que le quedaban a mi mujer para estar lista y salir para ver las fallas de Valencia.

La impresionante Falla de Na Jordana en honor al Caballo de Troya
L
Fallera con el delantal de cocinera

INGREDIENTES:
Pollo troceado
Aceite de Girasol
Para el marinado:Para el rebozado:
300 gr de harina para rebozar200 gr harina para rebozar
2 cucharadas pequeñas de pimentón dulce1/2 cucharada pequeña de curry
1/2 de cayena1/2 de ajo
1 de ajo1/2 de tomillo
1 de cebolla1/2 de eneldo
1 de curry1/2 de pimentón
1/2 de estragón 1 pizca cayena
1/2 de eneldo1 pizca de sal
1/2 de tomillo
Sal
Pimienta
Agua fría

ELABORACIÓN:

1- En un bol suficientemente grande añadimos los ingredientes secos del marinado y los mezclamos bien. En el caso de la cebolla y el ajo, los podemos poner en una brunoise muy fina (en pequeños cuadraditos), o incluso de los que venden en polvo, como especias. En el caso de la cayena, recomiendo incorporarla en forma de polvo, para que llegue por igual a toda la mezcla.

Mezcla para el marinado antes de añadirle el agua fria
2- A continuación añadiremos el agua fría e iremos mezclándola con el resto de ingredientes del marinado, empleando una varilla, hasta conseguir que tenga una textura muy ligera y semilíquida.


3.- Ahora ya podemos sumergir en la marinada nuestro pollo troceado, y lo dejaremos en la nevera macerando durante, al menos, 1 hora, para que la carne tome bien los sabores.













4- Mientras tanto, en otro bol, prepararemos la mezcla de ingredientes para el rebozado.

Mezcla para el rebozado
5- Ahora sólo queda sacar el pollo marinado y cubrirlo con el rebozo preparado, aprovechando que parte de la mezcla del marinado quedará adherida a él. Ésta solidificará durante la fritura, dando ese aspecto característico al pollo estilo Kentucky.



6- Por último, en una sartén honda, con aceite de girasol bien caliente, procederemos a freír las piezas del pollo rebozado, asegurándonos de que se haga de manera uniforme por todas sus partes, y procediendo a sacarlo una vez la cobertura haya alcanzado el color rojizo característico de la receta.



7- Ya sólo resta dejar el pollo sobre un plato cubierto con una servilleta absorbente para retirar la máxima cantidad del aceite de la fritura. De este modo, el resultado será un pollo súper crujiente por fuera, y súper jugoso por dentro, que podremos servir acompañado de ensalada y con salsa barbacoa, de mostaza o mostaza y miel. 



Como ya os he indicado al inicio de esta entrada, se puede variar la receta para adaptarla al gusto de cada uno. Así, si os gusta la comida picante, podéis añadir tabasco o cualquier otra salsa picante en la marinada, también se le puede añadir salsa de soja, que le dará ese punto salado y de sabor adicional, e incluso se pueden variar las proporciones de las especias añadidas tanto en la marinada como en el rebozo, y todo aquello que se os pueda ocurrir.

Por último, también podéis cambiar la presentación, empleando para ello distintas porciones del pollo, o incluso distintos cortes del mismo, como por ejemplo muslitos, alitas, fingers o nuggets.

Fingers de pollo con salsa de mostaza y miel

Bueno, ya no hay excusas para degustar un buen pollo frito: lo toceamos, lo marinamos, lo enharinamos y especiamos y luego lo freímos.

Ya me contaréis vuestra experiencia con esta receta y cuántos de vosotros la incluiréis en vuestro repertorio de platos más frecuentes. Y además les encanta a los niños, así que no hay más que decir.


Bon appétit.